El planeta Ertélion sigue sumido en la penumbra tecnológica causada por el último evento solar; pero el Gobierno Mundial comienza a restablecer poco a poco algunos servicios, destacando, por encima de todos, los canales de comunicación, principal instrumento de su poder.
Entretanto, la resistencia trata de sacar ventaja de la anómala situación, y los Guardianes, perseguidos sin descanso, recorren las tierras del norte, acercándose… quizás demasiado… al epicentro del poder del Nuevo Orden en el Reino de Eiliren.
En Socrianám las cosas no pintan mejor. Amenazas no previstas se ciernen sobre el Asteroide.
Escrito en forma de diario compartido y siendo el único texto en la historia de la Humanidad proveniente de otro planeta, el hasta ahora clasificado Diario de Ertélion es difícil de encasillar. Documento fidedigno o fraudulenta novela de “fantasía realista”, lo cierto es que esta magistral obra, por su cohesión, rigurosidad, fuerza y carácter de sus personajes y trepidante trama, puede llevar a la saga a convertirse, no sólo en una revolución literaria, sino en un auténtico fenómeno social.